“En España el hábito hace a la monja. Aquí la gente te evalúa y cataloga por lo que llevas puesto. Es un país marquista al ciento por ciento. Dime lo que llevas puesto y te diré quién eres por tus zapatos, tu cinturó o tu reloj. Sé que es una actitud un poco tercermundista, que recuerda a los dispendios de Ymelda Marcos o la mujer de Baby Doc Duvalier, pero es la triste verdad.
George Bernard Shaw dejó muy claro en Pigmalión, reconvertido por otros luego en My Fair Lady, que en el Reino Unido te catalogan por tu forma de hablar, sea lo que sea lleves encima. En Francia ocurre algo parecido. Aquí da igual que se te escapen las eses si vas hecha un brazo de mar. Prueba de entrar en una tienda cara con tu peor ropa y sin una marca visible y verás lo mal que te tratan las vendedoras, para las que le hábito, desde luego, hace la monja.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario