Según la tradición Danesa, sólo Christian, Frederik o Eric fueron los nombres elegidos para sus Reyes, 26. Pero desde hace 400 años los nombres de Christian y Frederik se vienen alternando, por lo que todo el mundo apuesta por Christian ya que por tradición es el nombre que le correspondería al hijo del Príncipe Federico. Aunque hay que señalar que precisamente Federico, el padre del niño, rompió la tradición hace 37 años cuando no se le bautizó con el nombre de su bisabuelo, Christian, ya que su madre, Margarita II, era la segunda mujer en la historia que heredaba el trono, después de seis siglos, rompiendo de manera natural dicha alternancia.
Como manda la tradición, la gran incógnita del nombre no se desvelará hasta el mismo día del bautizo, el 21 de enero, que tendrá lugar, en la capilla del Palacio de Christiansborg a las 11 de la mañana.
La elección de iglesia también resulta sorprendente ya se ha utilizado muy poco en los últimos tiempos para actos relacionados con la Familia Real.
La fecha también llama la atención ya que será el bebé más mayor de la Casa Real Danesa en recibir las aguas bautismales, con tres meses de edad.
Todavía no se sabe quienes serán los padrinos pero los rumores apuntan hacia la princesa Victoria de Suecia y el príncipe Felipe de Borbón.
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Casa Real danesa
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